Por Odalis F. Marte
@ofmarte
La
agricultura es definida como multifuncional en tanto que esta cumple con
funciones adicionales a su rol principal de producción de alimentos y fibras.
Estas funciones adicionales incluyen la seguridad alimentaria, la viabilidad
rural, la protección del medio ambiente, conservación de suelos, diversidad de
los ecosistemas así como la sanidad y fitosanidad nacional. Estas funciones son
entendidas como externalidades positivas o beneficios no alimentarios de la
agricultura por lo que denominan como “intereses no comerciales” (non-trade
concerns –NTC) en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Los
defensores de la multifuncionalidad aducen que el sector agrícola representa
directa o indirectamente una substancial parte del empleo y, en muchos casos,
no existen muchas alternativas de ocupación en el campo fuera de la
agricultura. En muchos países la cultura y las tradiciones están arraigadas en la
vida rural, por lo que la calidad de la vida del campo así como los problemas sociales y
ambientales frecuentemente son consecuencia de los procesos de urbanización por la migración que agranda las ciudades de forma superlativa.
Además, la conservación de la biodiversidad
está ampliamente relacionada con la protección del paisaje agrícola. El
paisaje rural aporta valor de
esparcimiento al aire libre el cual es un medio de educación medioambiental que
armoniza adecuadamente con objetivos de políticas sociales, culturales y otras
implementadas principalmente por los países desarrollados.
El incremento del comercio agrícola también aumenta el riesgo de que se introduzcan especies extrañas al ecosistema doméstico las cuales acarrean
pestes y enfermedades que pueden afectar los cultivos y otras plantas y animales
nativos. Además se entiende que una proporción adecuada de población en el
campo dedicada a faenas agrícolas previene la seguridad alimentaria de
cualquier choque externo que ponga en crisis el comercio internacional y la
economía doméstica.
Frente al
supuesto de que los beneficios no alimentarios pueden representar objetivos
legítimos de política existe, en contraposición, la postura de que la
multifuncionalidad ha sido mal usada como argumento para mantener políticas
domésticas distorsionadoras. En los términos de los Acuerdos de la Ronda
Uruguay sobre la Agricultura (URAA, por sus siglas en inglés), el apoyo que un
país suministra a su agricultura en atención a la multifuncionalidad debería
estar relacionada con qué tan ajustada esté su política a los criterios de su
denominada “amber box” lo cual constituye un conjunto de políticas que están
sujetas a una reducción cuidadosa en el tiempo, bajo los téminos de la URAA.
Algunos países pueden incrementar su apoyo a su agricultura sin violar estos
acuerdos como, por ejemplo, Estados Unidos, Nueva Zelandia, Cánada y Australia;
en cambio, Suiza, la Unión Europea, Japón y Corea del Sur, quienes son los
mayores defensores de la multifuncionalidad, tienen poco espacio para ello en
vista de la alta protección que ofrecen a sus agriculturas.
Políticas de distorsiones
mínimas previstas para los intereses no alimentarios
Un conjunto de políticas
pueden ser contempladas para alcanzar los objetivos no alimentarios al calor de
la multifuncionalidad de la agricultura. Algunas políticas distorsionan el
comercio internacional más que otras. La tabla que se presenta más abajo compara ejemplos de
instrumentos de política que tienen poco o ningún efecto distorsionador sobre
el comercio, tales como:
·
Políticas que apuntan hacia un objetivo específico
de productos no alimentarios que resultan en una mínima distorsión al comercio
·
Políticas que sin crear distorsiones alcanzan
adecuadamente sus objetivos
·
Políticas que proveen beneficios no alimentarios
indirectamente a través de los mecanismos de mercado las cuales crean mayores
distorsiones.
Comparación de políticas de
acuerdo a sus efectos sobre los mercados
|
||
Productos
no alimentarios
Medioambiente:
Paisaje rural
|
Efectos
mínimos en el mercado
Compra o
transferencia de derechos de uso de la tierra
|
Altamente
distorsionante
Subsidios a la
producción que incrementa la rentabilidad relativa de la agricultura con
respecto a otros sectores de la economía
|
Desarrollo Rural:
Viabilidad de
las comunidades rurales
|
Infraestructura
rural para apoyar la creación de trabajos no agrícolas
|
Políticas
agrícolas vinculadas a la producción las cuales incrementan el producto
en tanto en zonas rurales como zonas
marginales ricas
|
Seguridad alimentaria:
Asegurar la
disponibilidad de oferta de alimentos
|
Provisión de
almacenamiento público de alimentos
|
Subsidios a la
producción para alcanzar la seguridad alimentaria
|
Fuente: Bohman et al (1999).
Consideraciones finales
Los principales proponentes
de la multifuncionalidad son los países desarrollados, principalmente la Unión
Europea, Japón y Corea del Sur; quienes mantienen disputas con
Estados Unidos sobre liberalización del comercio agrícola.
Los países
menos desarrollados que dependen de la agricultura como fuente de generación de
riqueza son los mayores perjudicados del proteccionismo agrícola.
Ni la OMC,
organismo internacional, o país cuestiona el derecho de las naciones de
proteger sus intereses no agrícolas del sector rural, sin embargo, sí se
cuestionan los instrumentos de política utilizados para alcanzar sus fines. La
mayor problemática que se plantea es que la sobreprotección de la agricultura
en atención a su multifuncionalidad se ha estado ejecutando con un alto costo
de eficiencia interna la cual se transfiere lastimosamente al exterior mediante
la distorsión de los mercados y el impedimento a que los países pobres agroexportadores
alcancen una mayor participación en el comercio mundial y de acceder a las
nuevas tecnologías agrícolas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario