jueves, 16 de febrero de 2017

Aprestos de desregulación financiera en Estados Unidos: Ley Dodd-Frank y metales conflictivos

Mientras indagábamos sobre posibles efectos de una posible flexibilización de las regulaciones financieras en los Estados Unidos sobre las economías como la dominicana, y sus implicaciones para la política monetaria, mediante una modificación de la Ley Dodd-Frank de Reforma de Wall Street y Protección del Consumidor (http://www.bancentral.gov.do/noticias/pag_abierta/archivos/pag20170214.pdf), notamos aspectos de esa normativa que van más allá de lo concerniente a la estabilidad financiera.
Por ejemplo, el artículo 1502 de esta Ley incluye requisitos para las empresas que utilizan oro, estaño, tungsteno y tántalo, metales que son insumos en la industria electrónica, deban determinar si esos materiales provienen de la República Democrática del Congo o de un país adyacente y, en caso afirmativo, llevar a cabo una "debida diligencia" de su cadena de suministro para determinar si sus compras de minerales contribuyen al financiamiento de grupos armados en la zona. Este aspecto concitó malestar en el sector empresarial estadounidense argumentando lo costoso de cumplir con la regulación.
La Ley de Dodd-Frank (2010) se considera un marco regulatorio muy grande de 2,300 páginas. Esta Ley restituyó y amplió muchas de las provisiones regulatorias de la Ley Glass-Steagall, que sólo contaba con 37 páginas, la cual había sido promulgada en 1936 luego de la Gran Depresión. El sector privado en Estados Unidos, incluyendo a las instituciones financieras se quejan de que el marco regulatorio es demasiado abarcador, engorroso y costoso de cumplir, por lo que les resta capacidad de expansión de sus negocios. La administración del presidente Trump quiere satisfacer esas demandas aduciendo que perjudica el acceso al crédito, pero recientemente la gobernadora del Banco de la Reserva Federal, Janet Yellen, negó que hubiera restricciones al crédito citando una encuesta de la National Federation of Independent Businesses en donde el 96% de los agentes económicos consultados afirman que accedían al crédito privado bajo requisitos normales. Yellen también afirmó que los bancos estadounidenses son más rentables y sólidos que sus contrapartes en países desarrollados.

Mirando tanto interés político alrededor de la regulación financiera, uno se puede preguntar si no habría algo más que querer facilitar el acceso al crédito. Para los políticos profesionales y aficionados, el ejercicio de la política es excitante, para los tecnócratas puede ser una actividad cargada de misterios. Algunos de esos misterios pueden resultar imperceptibles para la opinión pública porque, como en su momento afirmaba Juan Bosch, “en política hay cosas que se ven y cosas que no se ven, y las que no se ven son las más importantes".